Por
Carlos M. Rodríguez C.
Como
siempre….uno queda estupefacto con las cosas que lee en la prensa diaria. Tanto
la “oficialista” como la “revolucionaria”. O sea.
Resulta
que en un bochinche de esos que se celebran en los diversos Centros
Penitenciarios del país, esta vez en la Penitenciaría General de Venezuela,
conocida como la cárcel de San Juan de Los Morros, bandas armadas, alojadas
como “residentes” en dichas
instalaciones, se enfrentaron, haciendo detonar un explosivo de esos llamados
“granada” y ocasionaron la muerte a 11 personas, así como a otro número de
heridos, entre los “reclusos alojados”, familiares, visitantes y funcionarios
del MPP de Servicios Penitenciarios.
Según
las informaciones el suceso ocurrió en
la fiesta de celebración del cumpleaños de un pran apodado “La Guaira” o ViruVirú (el cual pareciera no tiene
nombre que lo identifique), la cual
había sido autorizada y en la que para ello “habían ingresado 160 cajas de
distintos licores, se había autorizado el ingreso de un grupo de invitados
especiales, familiares y tres agrupaciones musicales de salsa, además de un
autobús con animadoras”. (Faltaron los cotillones, pepitos, refrescos,
payasitos, pintacaritas, brincabrinca para entretener a esos angelitos)
Yo
me pregunto ¿Será que uno no ha entendido lo que son los derechos de los
privados de libertad en el marco de la Revolución Bolivariana? ¿Qué uno desconoce hasta dónde llega el
derecho y desde dónde la corrupción, la complicidad y la alcahuetería?
Entiendo
que el régimen capitalista es injusto ya que la mayoría de los privados de
libertad son personas de escasos recursos, muchas veces víctimas de la misma
sociedad, niños y niñas agredid@s, marginados, excluidos, algunos victimas de circunstancias negativas, pero…
Entiendo
también que ante la falta de un aparato jurídico sano, que va desde los
fiscales, jueces, funcionarios policiales, es muy difícil administrar justicia sana. Entiendo también
que la justicia forma parte de ese monstruo llamado delito, ya que en él se
vive del delito, de la trampa, de la corrupción, y que la justicia siempre se
inclina por quien tiene el poder tanto político como económico.
Y
comprendo que es necesario transformar
los centros de reclusión de escuelas para delincuentes a centros de
reeducación, lo que permitiría rescatar, mejorar la conducta, convertir en
ciudadanos a muchos reclusos, penados que podrían mejorar su calidad de vida.
Pero
lo que no puedo entender ni comprender es que ¿cómo los penales se han
convertido en hoteles de lujo que alojan, con comodidades que no tienen los
ciudadanos comunes, a peligrosos delincuentes, asesinos, sicarios que se
convierten en los dueños de los penales, con todo tipo de privilegios tales
como tablets, computadoras, armas de grueso calibre, con guarda espaldas, caballos
de paso, hasta piscinas dentro de las instalaciones, que dirigen bandas desde
el penal, que a través de llamadas extorsionan, ordenan la ejecución de
ciudadanos, de pranes rivales, que tienen días de salida del penal, que son
llevados a discotecas, que se les permite la visita a damas de compañía? y pare
Ud. de contar.
Y
esto es un secreto a voces, que lo saben
hasta los niños que asisten a las guarderías, aún las más costosas.
¿Será
qué los altos funcionarios del gobierno nacional (incluyendo ministros,
viceministros, directores de línea, etc.) vinculados con el tema de la atención
penitenciaria desconocen esta situación? ¿Qué los sistemas de inteligencia y
seguridad ignoran que se introducen armas de todo tipo, explosivos, drogas,
alcohol, celulares por la puerta
principal de “todos” las cárceles del país? ¿Qué dicen que hasta los
mismos funcionarios de los cuerpos de
seguridad y personal que laboran en estos sitios son los que introducen, previa
paga por los reclusos, todo tipo de objetos y sustancias no permitidas dentro
de estos centros?, ¿Qué los directores de los centros penitenciarios forman
parte de esa red? ¿Qué hasta cola hacen para “bachaquear” dentro de los
recintos penitenciarios?
¿Será
que dentro de los penales existen fábricas de AK14, morteros, granadas, glock,
berettas, FAL, fábricas de bebidas alcohólicas como whysky, Ron, de
medicamentos, drogas, celulares, tablets, laptops? Si es así, será bueno que los ministros
encargados de la producción del país se enteraran para ver si incorporan a
dichos centros como fábricas al aparato productivo del país, ya que su producción es alta y de
calidad.
Y
la oposición gozando un bolón y haciendo fiesta de la desgracia en la que ellos mismos tienen las manos
metidas, mientras el pueblo, los padres decentes, honrados y trabajadores, los
niños, los ancianos, las madres trabajadoras viven la angustia y el temor de
ser víctimas de los delincuentes, que muchas veces delinquen para que los
alojen en esas “posadas de lujo”, en esas “casas quintas” en que se han
convertido los centros de reclusión de prisioneros, o como quiera llamarse.
Dice
el dicho “en boca cerrada no entran
moscas”, pero también dice el dicho “si no hay celestinas no hay prostitutas”.
Soy partidario de que el revolucionario debe morir por la verdad y la justicia,
que callar es omitir y ser cómplice de las situaciones irregulares que dañan,
debilitan el proceso revolucionario.
En
esta publicación sólo digo lo que oigo. Si no es así, que me disculpen los que
de una forma u otra son aludidos. Si es cierto todo lo que se dice…Dios no
agarre confesaos.
Patria,
socialismo, o muerte. Venceremos
carrodcas@gmail.com
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