Por: Cécil Gerardo Pérez
Estamos en contra de persecuciones entre camaradas de la izquierda, así
como de cuestionamientos innecesarios entre grupos o personas que
comparten el ideal político y social de la sociedad socialista como
horizonte para Venezuela. A veces la gente intenta, para victimizarse,
colocarse al nivel de otras situaciones del pasado.
Pero, como dicen en mi pueblo, ni tan calvo ni con dos pelucas. Con el reciente allanamiento a la sede de Marea Socialista, muchos “aporreadores” han intentado cuestionar a fondo, o darle mayor fuerza argumentativa a su posición antigobierno. Y han pretendido comparar de manera absolutamente descontextualizada a Nicolás Maduro con Rómulo Betancourt, al PSUV con Acción Democrática y a Marea Socialista con el MIR o el PCV que fueron perseguidos e ilegalizados en los años ´60.
Ninguna de estas aseveraciones es verdad. Y es importante que no nos hagamos eco de ellas en medio de la más bestial guerra socio-política y económica que gobierno alguno haya sufrido en nuestra Patria, incluso, el período del Comandante Chávez. Los compatriotas de Marea Socialista, muchos de ellos a quienes respeto, son luchadores contra la derecha venezolana y el capitalismo salvaje que acá impera aún. Cuestionan con razones los errores del gobierno de Nicolás Maduro, aunque no comparto muchas de sus acciones.
En todo caso, que se exijan las explicaciones verdaderas de los hechos. Ya algunas han salido en los medios y habría que plantear que eso no vuelva a ocurrir. http://laiguana.tv/articulos/29500-sede-marea-socialista-allanamiento-dolares-cicpc. Pero lo que no pueden algunos “opinadores” es pretender hacer las comparaciones que en estas páginas hemos leído.
Nicolás Maduro no se ha apartado del legado del Comandante Chávez. Y lo ha demostrado manteniendo las políticas sociales, económicas e internacionales del gobierno bolivariano, así como la defensa ante la arremetida de la derecha nacional e internacional. Puede cometer errores, como los cometió (y muchos) Chávez, pero hasta ahora ha demostrado mantenerse en el ámbito del legado del líder que le confió al pueblo venezolano su herencia política y por el que millones de chavista votamos.
El PSUV, partido que también ha cometido errores garrafales (admitiendo a mi juicio) que no ha estado a la altura del compromiso que tenemos, tampoco puede considerarse como la AD perseguidora de izquierdistas e ilegalizadora de partidos políticos y mucho menos masacradora de miles de camaradas como los que fueron vilmente asesinados en las dos primeras décadas de la democracia adeco-copeyana. Y Marea Socialista debe convertirse en un partido de masas, para no quedarse en el “foquismo” que a veces implica una página web (Aporrea) en la que participamos una diversidad de escribidores, o en el ámbito de la simple denuncia.
Sólo así podrá de verdad, como dicen los sociólogos, coadyuvar, al proceso revolucionario venezolano. Mientras sigamos combatiendo al imperialismo, al capitalismo y todas sus perversiones y construyendo la sociedad socialista, que es lo esencial, lo fundamental, la gran historia para hacer honor a los líderes que nos lo encargaron como Bolívar, Marx, Lenin. Trotsky, Mao, Ho Chi Min, Fidel, el Che, Chávez y tantos otros. Y para lograr que nuestro pueblo se desarrolle realmente en una sociedad solidaria, justa y equitativa.
Pero, como dicen en mi pueblo, ni tan calvo ni con dos pelucas. Con el reciente allanamiento a la sede de Marea Socialista, muchos “aporreadores” han intentado cuestionar a fondo, o darle mayor fuerza argumentativa a su posición antigobierno. Y han pretendido comparar de manera absolutamente descontextualizada a Nicolás Maduro con Rómulo Betancourt, al PSUV con Acción Democrática y a Marea Socialista con el MIR o el PCV que fueron perseguidos e ilegalizados en los años ´60.
Ninguna de estas aseveraciones es verdad. Y es importante que no nos hagamos eco de ellas en medio de la más bestial guerra socio-política y económica que gobierno alguno haya sufrido en nuestra Patria, incluso, el período del Comandante Chávez. Los compatriotas de Marea Socialista, muchos de ellos a quienes respeto, son luchadores contra la derecha venezolana y el capitalismo salvaje que acá impera aún. Cuestionan con razones los errores del gobierno de Nicolás Maduro, aunque no comparto muchas de sus acciones.
En todo caso, que se exijan las explicaciones verdaderas de los hechos. Ya algunas han salido en los medios y habría que plantear que eso no vuelva a ocurrir. http://laiguana.tv/articulos/29500-sede-marea-socialista-allanamiento-dolares-cicpc. Pero lo que no pueden algunos “opinadores” es pretender hacer las comparaciones que en estas páginas hemos leído.
Nicolás Maduro no se ha apartado del legado del Comandante Chávez. Y lo ha demostrado manteniendo las políticas sociales, económicas e internacionales del gobierno bolivariano, así como la defensa ante la arremetida de la derecha nacional e internacional. Puede cometer errores, como los cometió (y muchos) Chávez, pero hasta ahora ha demostrado mantenerse en el ámbito del legado del líder que le confió al pueblo venezolano su herencia política y por el que millones de chavista votamos.
El PSUV, partido que también ha cometido errores garrafales (admitiendo a mi juicio) que no ha estado a la altura del compromiso que tenemos, tampoco puede considerarse como la AD perseguidora de izquierdistas e ilegalizadora de partidos políticos y mucho menos masacradora de miles de camaradas como los que fueron vilmente asesinados en las dos primeras décadas de la democracia adeco-copeyana. Y Marea Socialista debe convertirse en un partido de masas, para no quedarse en el “foquismo” que a veces implica una página web (Aporrea) en la que participamos una diversidad de escribidores, o en el ámbito de la simple denuncia.
Sólo así podrá de verdad, como dicen los sociólogos, coadyuvar, al proceso revolucionario venezolano. Mientras sigamos combatiendo al imperialismo, al capitalismo y todas sus perversiones y construyendo la sociedad socialista, que es lo esencial, lo fundamental, la gran historia para hacer honor a los líderes que nos lo encargaron como Bolívar, Marx, Lenin. Trotsky, Mao, Ho Chi Min, Fidel, el Che, Chávez y tantos otros. Y para lograr que nuestro pueblo se desarrolle realmente en una sociedad solidaria, justa y equitativa.
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